Alfonso Moreno. Olivarero de Jaén: “Es imprescindible regar los olivos para asegurar la producción”


Alfonso Moreno Aranda. Olivarero de Villargordo (Jaén)

“Es imprescindible regar los olivos para asegurar la producción”

Con 550.000 hectáreas de olivar, la provincia de Jaén supone cerca de un 20% de la superficie mundial destinada a producir este oro líquido. La mayoría de estas explotaciones son de tamaño pequeño y mediano. Es el caso de la explotación de Alfonso Moreno, olivarero de Villargordo (Jaén), que cuenta con cien hectáreas de olivar tradicional que riega con agua del Guadalquivir.

¿Cuál dirías que es el principal problema que afrontáis los olivareros tradicionales?

Nuestro principal problema es la competencia de otras zonas que están instalando plantaciones superintensivas de olivo, por ejemplo en Portugal. También hemos venido teniendo bastantes problemas con el agua que necesitamos para regar los olivos.

¿Por qué es necesario regar los olivos?

Hay momentos en el año en los que es necesario aportar agua a los olivos, como durante la floración o cuando está haciendo el hueso. Necesitamos regar para dar seguridad a la producción y evitar años tan malos como los que hemos tenido últimamente. Es imprescindible regar los olivos.

Yo tengo instalado riego por goteo. Aplico 16 litros por olivo y hora durante unas 20 horas semanales desde abril hasta septiembre, siempre con la autorización de la comunidad de regantes.

Regamos con agua del Guadalquivir y con la que se incorpora de los desagües de los pueblos de la zona, que la filtramos y la utilizamos sin problema.

¿Qué le dirías a los que acusan a los agricultores de gastar agua?

Los agricultores no gastamos el agua, sino que la convertimos en alimentos. En nuestro caso en un producto tan emblemático como el aceite de oliva.

Además, en mi caso, no gastamos ni la mitad de la asignación de agua que tenemos concedida por la comunidad de regantes, ya que tenemos incluso goteros integrados que aún utilizan menos agua.

Lo que sí nos gustaría es tener más balsas y más grandes para poder almacenar más agua. El futuro pasa por modernizarnos y producir utilizando cada vez menos agua.

¿La Administración está apoyando las iniciativas de modernización de los agricultores?

Últimamente no. Hace unos años sí hubo ciertas ayudas y los agricultores invirtieron en maquinaria, riegos… tecnologías que nos han hecho ser más productivos y a la vez más sostenibles.

Las ayudas de la PAC también llegan a nuestro sector, aunque desde luego para los pequeños y medianos agricultores las ayudas son un apoyo, pero poco más.

¿Utilizas glifosato en tu explotación?

Yo sí aplico tratamientos con glifosato, siempre siguiendo las recomendaciones de ingenieros agrónomos y técnicos expertos. Este producto es imprescindible para nosotros para poder controlar las malas hierbas.

El uso de estos productos está cada vez más controlado y los agricultores estamos cada vez más formados en el uso de estos tratamientos, gracias también a las organizaciones agrarias, como UPA, y a las cooperativas de las que formamos parte.

Hoy en día el glifosato se usa de forma muy restringida, sólo en zonas donde no es posible arar la tierra, como alrededor del pie del tronco del olivo y respetando la cubierta vegetal.

¿Por qué no todos los agricultores estáis certificados en ecológico?

La realidad es que es difícil sacar adelante una producción en ecológico. Las plagas cuando vienen, vienen, y si no la combates puedes perder tu producción y tu forma de vida. Las circunstancias te obligan a combatir plagas y enfermedades que pueden arruinarte.

¿Cómo ves la plaga de la Xylella fastidiosa?

La vemos con muchísimo miedo. Además no tiene solución por el momento. Nosotros analizamos cada día nuestros árboles para comprobar su estado sanitario.

¿Qué prácticas llevas a cabo para mejorar la calidad de tus aceitunas?

Lo primero recibir consejos de expertos que te orientan, con el único objetivo de incrementar la calidad y la cantidad de tu producción. Luego en las cooperativas, como la de Villargordo, donde yo comercializo mi producción, cada vez se hacen mejores prácticas que se traducen en un mejor aceite de oliva.